Hola
mi gente!
Hace
algunas semanas fui a un restaurante muy conocido en la ciudad llamado: “Salón Cantón”,
y probé su bandeja de degustación.
Todos
los platos estaban exquisitos, pero el que me dejó impactada fue: El pollo en
salsa de miel y ajonjolí!
Por
supuesto, como ya ustedes lo imaginan, llegué a la casa a investigar sobre esta
receta, también había interrogado al mesonero para lograr obtener un poco de
información sobre la preparación, así que ayer decidí prepararlo.
Es
una de esas recetas, que aunque nunca la había hecho, sabía que quedaría bien!
Básicamente
consiste en
- Trocear 4 o 5 pechugas de pollo en cubos y pasarlas por harina, luego huevo batido y finalmente por maicena.
- Sofreír los trozos con un poco de aceite, durante 10 minutos en un Wok o sartén, revolviendo hasta que doren.
Mientras
el pollo se cocina, en un bowl pequeño se prepara la salsa, simplemente
combinando estos ingredientes:
- 6 Cucharadas de miel.
- 4 Cucharadas de ketchup.
- 3 Cucharadas de azúcar
- 1 Cucharada de azúcar morena.
- 2 Cucharadas de vinagre blanco.
- 3 Cucharadas de salsa de soya.
- ½ Cucharadita de sal.
- 1 Cucharadita de ajo en polvo.
- Semillas de Ajonjolí, cantidad deseada.
Al
estar el pollo dorado, se le añade la salsa y se deja cocinar durante unos 3
minutos, para que la misma caramelice.
Si
se desea espesar aun más, se puede disolver 2 cucharadas de maicena en 1
cucharada de agua, y añadírsela al pollo con la salsa.
Al
finalizar, se agregan las semillas de ajonjolí.
En
mi opinión el acompañante ideal para este pollo con sabores tan intensos, es
simplemente arroz blanco.
Aquí
les dejo esta maravilla, ya lista para ser devorada, y una foto resumen de
esta simple preparación!
Besos,
Astrid.
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